
Víctor M. Toledo
Basado en la página Web del Dr. Toledo. más información.

Víctor Toledo nació en la ciudad de México en 1945. Desde muy joven se incorporó a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), primero como estudiante de preparatoria, después como estudiante de biología (1963-66) en la Facultad de Ciencias y, a partir de 1970, como investigador científico, primero en el Instituto de Biología y, más adelante, en el Instituto de Ecología. Sus primeras investigaciones se centraron en el estudio de la diversidad de especies de árboles tropicales a partir de la teoría de la información. Tales estudios, pioneros en México, lo llevaron a interesarse por la interpretación biogeográfica e histórica de los patrones de biodiversidad en las regiones cálidas y húmedas de México.
Fuertemente impresionado por los graves problemas de deforestación y deterioro ecológico, no tardó demasiado tiempo en apreciar que era necesario explorar las causas sociales de tales impactos y aceptar que los procesos naturales no pueden estudiarse sin entender sus vínculos con la sociedad y viceversa. En 1971 realizó una investigación colectiva sobre la "ecología del ejido", con la que inauguró un nuevo modo de abordar la problemática ecológica, formulando una metodología avanzada que, tres décadas más tarde, devino en un imperativo a escala mundial: los estudios y los análisis interdisciplinarios.
A su sólida formación en biología y en ecología fue añadiendo, a partir de los años setenta, una formación social permanente que arrancó en 1976, con una estancia sabática en la École des Hautes Études en Sciences Sociales (Escuela de Estudios Superiores de Ciencias Sociales) de París, y a partir de la cual desarrolló su formación continua en los campos de la economía política, las culturas agrarias y la sociología rural, abriendo siempre nuevos horizontes metodológicos y conceptuales.
El planteamiento interdisciplinario le permitió llevar a cabo sendos estudios en dos regiones indígenas: la selva Lacandona, en Chiapas, y la cuenca del lago de Pátzcuaro Michoacán, una experiencia a la que tuvimos la suerte de acceder y que constituye un modelo absolutamente avanzado de participación innovadora, un modelo que la cultura sostenibilista del Primer Mundo debería hacer suyo. Consiste en lo que Toledo denomina "diálogo de saberes", reconociendo implícitamente otras formas de conocimiento, más allá del académico, en el que éste último se combina con los conocimientos empíricos populares. Una metodología que aplica en diversos estudios de comunidades rurales en Veracruz, Oaxaca Tabasco y Michoacán. Su última aportación a esta perspectiva es la aplicación de una metodología socioecológica para interpretar la realidad rural de México.
Son destacables sus aportaciones, siempre innovadoras, al campo de la etnoecología (el estudio de las relaciones entre las culturas indígenas y la naturaleza), materia en la que se erige como uno de lo líderes académicos más destacados del mundo. Actualmente, la etnotecnología, que ya fue el tema de su tesis doctoral, constituye su principal preocupación académica. Sus valiosas aportaciones teóricas sobre las relaciones entre las culturas indígenas y la naturaleza le han valido un amplio reconocimiento internacional. Es fundador y editor de la revista de circulación internacional Etnoecológica.
Sus aportaciones también han incidido en la nueva disciplina de la ecología política. El último de sus libros, recién publicado, ofrece una alternativa original para la consecución de la paz en Chiapas, a partir la ecología, la sabiduría acumulada por los pueblos indígenas y la búsqueda de una modernidad alternativa.
A lo largo de sus más de treinta años de trabajo académico ha desarrollado una extraordinaria labor de investigación, en docencia y formación; en el campo del pensamiento ambiental, vinculando la ciencia ecológica con la sociedad, y en la interpretación interdisciplinaria de las sociedades rurales e indígenas.